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COVID-19, Educación en el Hogar y Estrategias de Salud Mental para la Familia con la Dra. Lugo-Morales
El COVID-19 cambió drásticamente la educación de la mayoría de los estudiantes, ya que se han visto forzados a desarrollar un currículo en el hogar. Esto presenta un conjunto de retos nuevos tanto para los estudiantes, como para sus maestros/as y padres. Para diseminar estrategias de salud mental para niños/as, padres y maestros/as ante esta situación, entrevistamos a la Dra. Wilbeth Lugo-Morales.
La Dra. Lugo-Morales es nacida y criada en el pueblo de Moca, Puerto Rico. Tiene un bachillerato en Psicología, y un doctorado en Psicología Escolar de La Universidad de Iowa. La doctora actualmente hace un postdoctorado en Texas, evaluando niños/as con autismo, problemas emocionales, y de comportamiento en la escuela. La doctora ayuda a estudiantes, padres y maestros/as determinar si un/a niño/a requiere algún tipo de acomodación particular en la escuela, si necesitan un programa individualizado de educación especial, y también ayuda a conseguir los recursos necesarios para estos/as niños/as.
A continuación algunos puntos importantes de la entrevista para nuestro podcast, cuyo audio puedes encontrar al final de esta página y en Apple y Spotify Podcasts.
Rutina y actividades en familia para mantener el núcleo familiar saludable durante el COVID-19.
Gracias a la tecnología, muchos padres pueden trabajar desde la casa, y esto reduce la probabilidad del contagio con COVID-19 y brinda más seguridad económica al hogar en estos momentos difíciles. Sin embargo, trabajar desde la casa, mientras se tiene los hijos/as en el hogar crea una serie de problemas y estrés mientras se balancean las labores de oficio y domésticas. La doctora menciona que estos desafíos van a crear dificultades y NO se espera que los padres puedan balancear todas estas responsabilidades efectivamente de primera instancia.
Una de las maneras para manejar estas nuevas responsabilidades es crear rutinas con la familia completa en mente. Realizar una rutina crea un sentido de seguridad, tanto en el padre como en el/la niño/a. Esta rutina puede incluir horas de comida, de estudio y hasta el tiempo dedicado al descanso y recreo. Sin una rutina para el hogar, es fácil que los padres se sientan que están siendo menos productivos trabajando, lo que puede llevar a trabajar horas demás para compensar innecesariamente. De la misma manera, como padre o encargado, puedes sacar tiempo en el día donde haya menos probabilidad que se interrumpan tus labores, como en la noche, o bien temprano en la mañana.
Una recomendación importante de la doctora es que aseguren sacar tiempo para compartir en familia, ya sea con juegos de mesa, ver alguna pelicula juntos y llamar por facetime o plataformas similares a los seres queridos. Hacer estas actividades a lo largo del día los puede acercar más como familia mientras se reducen las posibles fricciones que esta situación creará en el núcleo familiar.
Hay que hablarle a los/as niños/as de lo que está pasando.
Reconociendo que todos los niños/as son diferentes, la doctora aclaró que es necesario que los padres, o guardianes, tengan conversaciones sobre lo que está pasando con los/as niños/as, pues, con la accesibilidad de la tecnología, ellos saben mucho más del tema de lo que pensamos. Por esto es mejor que la explicación provenga de los padres, antes que escuchen información de fuentes que no sean dirigidos para niños/as. Inclusive niños/as con autismo u otras condiciones, también se beneficiarían de una conversación con sus padres o seres queridos que esté a su nivel de educación y lenguaje. En particular, la doctora recomienda hablarle a los/as niños/as sobre los riesgos, pero dejándole saber que tienen un plan de acción por si alguien se contagia y que existen muchos medicos, enfermeras y otras personas trabajando fuertemente para ayudar a quienes se enfermen. Sin embargo, la Dra. Lugo-Morales aclara que es muy importante no catastrofizar la emergencia, más bien que contesten las preguntas de los/as niños/as con honestidad y brevedad, usando el idioma adecuado y con un lente de positivismo para mantener buena actitud del/a niño/a.
La educación en el hogar no deben ser horas continuas sentado leyendo o haciendo ejercicios de clase como en un salón tradicional.
La educación en el hogar tiene una dinámica totalmente diferente al de la escuela. La doctora recomienda que no se trate de seguir el patrón de estudio de la escuela, pues puede resultar demasiado difícil, frustrante, o imposible. Sugiere mejor que se haga de manera más activa, quizás haciendo cosas típicas en el hogar con las que se pueda aprender de ciencias, matemáticas, y otras materias. Por ejemplo, cocinar mientras se educa del cambio físico que ocurre cuando el agua se evapora, horneando un bizcocho para explicar sobre proporciones, medidas, y así por el estilo.
Además la doctora enfatizó estudios activos haciendo observaciones desde la casa. Un ejemplo fácil es la observación de plantas que se tengan en el hogar o cultivar mientras se explican los procesos de fotosíntesis, germinación y otros. El punto es usar lo que tengas accesible en el hogar como recurso para la enseñanza.
Para unas buenas guías y recursos para dar clases a sus hijos en casa, la Dra. Lugo-Morales recomendó Khan Academy, una plataforma de educación en línea con temas que van de escuela elemental hasta grado universitario. También recomendó usar las guías brindadas por el Departamento de Educación, de la misma manera, ofrece guías para padres de estudiantes de Educación Especial o Diversidad Funcional.
La doctora recalcó en varias ocasiones que los padres no deben ponerse una presión excesiva y esperar ser perfectos, mucho menos mientras comienzan a desarrollar estas rutinas. Esto es terreno nuevo para muchos y todos los días habrán desafíos diferentes, pero con el tiempo y un poco de esfuerzo y creatividad, todo irá cayendo en su sitio.
Los/as maestros/as, al igual que sus estudiantes y padres, están pasando por las mismas dificultades que todos.
Muchos/as maestros/as se han encontrado la dificultad de tener que manejar plataformas en línea como Zoom (guía en español para el uso de Zoom), con poca o ninguna preparación o con poco o ningún acceso al internet. Esto, en conjunto con tener que alterar un currículo establecido y efectivo, presenta un desafío enorme para cualquier maestro/a. Tampoco es viable que un/a maestro/a pueda suplir todas las necesidades de aprendizaje en el hogar, como lo haría en la escuela.
Por esto hay que tener paciencia con los/as maestros/as, y entender que no podrán tener la misma función que tenían en el salón de clases. Una buena sugerencia, para quienes tengan tiempo, es ofrecer ayuda a los/as maestros/as, ya sea de manera técnica usando las plataformas en línea, o por medio de ayuda más directa, buscando guías o explicaciones sencillas de las materias, que se puedan diseminar a los estudiantes de la clase para suplementar las explicaciones de el/la maestro/a.
Otra recomendación de la doctora es comunicarse con padres o guardianes que sean parte de la comunidad de educación en la casa (Homeschooling). Estos ya tienen buena experiencia y recursos para la educación en el hogar y en línea. Aquí una lista de currículos de HomeSchool World, una plataforma con experiencia orientando a padres y proveyendo recursos para la educación en casa.
Seamos buenos vecinos ya que la educación ahora depende grandemente de la tecnología y el internet, y no todos tienen el dinero para acceder estos recursos.
La doctora nos comenta que este tipo de crisis tiende a resaltar la desigualdad socioeconómica de los países y comunidades. En el caso del COVID-19, obligando los estudios en la casa, resalta la insuficiencia económica de muchas familias y este factor se debe tener en consideración. Si sabes de familias con niños/as que no tienen acceso a necesidades básicas, mantente en comunicación con ellos. Si no tienen internet, llámalos por teléfono para explicarles las asignaciones que están dando los/as maestros/as en la escuela. Si no tienen acceso a teléfono, háblales en persona con una distancia mínima de 6 pies para asegurar buen “social distancing” y prevenir que el COVID-19 se continue propagando. De la misma manera se puede prestar equipo electrónico, teniendo las debidas precauciones y desinfectando el equipo antes y después. Debemos recordar que esta crisis será una situación temporera y la manera en la que actuemos durante y después de esta crisis puede ayudar a forjar puentes de comunicación y empatía que promueven un ambiente saludable para la familia y la comunidad.
Espero que esta información te haya sido útil para estos desafíos que ya estamos enfrentando, y que te ayude a mantener una perspectiva positiva para poder asegurar buena salud mental para tu familia y la de tu comunidad.
Puedes escuchar la entrevista entera aquí abajo y también en Apple y Spotify Podcasts.